MV AGUSTA F4CC

En este 2015 se han generalizado las motos deportivas de 200 CV de potencia, aunque ese hito ya se alcanzó en 2006 con una de las deportivas más exclusivas hasta la fecha: la MV Agusta F4CC. Claudio Castiglioni devolvió todo el brillo que MV Agusta disfrutó entre mediados de los 60 y mediados de los 70 con Giacomo Agostini con esta Superbike planteada más como una obra de arte que como una simple moto. No es de extrañar que todavía sea una de las motos más caras del mundo, 100.000 euros para cada una de sus 100 unidades producidas.

Las siglas ‘CC’ son las de Claudio Castiglioni, lo que habla de la implicación personal del capo de la marca de Varese. El objetivo era llevar a otro nivel de exclusividad y prestaciones a la ya de por sí espectacular MV Agusta F4. La deportiva diseñada por Massimo Tamburini ganaba a simple vista un carenado de fibra de carbono, un sistema de escape y motor con piezas de titanio y un asiento específico en Alcántara entre otros. Aunque había mucho más, como suspensiones Marzocchi (horquilla de 50 mm) y Sachs derivadas de la competición, frenos de Brembo Racing o basculante de magnesio. El resultado era un peso en seco de 187 kilos, nada mal teniendo en cuenta el poderío de su motor tetracilíndrico de 1.078 cc.

La MV Agusta F4CC rendía 200 CV de potencia a 12.200 rpm, con un par máximo de 125 Nm a 9.000 rpm especialmente radical gracias al sistema Torque Shift System (TSS). Prometía 315 km/h de velocidad máxima, aunque nunca se llegó a comprobar en circunstancias reales, ya que en la MV Agusta F4CC no hablamos ya de una deportiva para salir de curvas. Es una obra de arte para coleccionistas más apta para admirar en un garaje. Cualquiera se arriesga a un arrastrón con esta preciosidad. No tiene sustitución posible.

Tal era su exclusividad que junto a la moto se lanzaron 100 unidades de una chaqueta de cuero Trussardi y reloj Girard-Perregaux a juego. En el caso del reloj salía por nada más y nada menos de 15.000 euros, en consonancia con lo insigne de la moto.

Puede que las deportivas de ahora sean más eficaces con la misma potencia, pero a la MV Agusta F4CC nadie le roba el aroma de haber sido la deportiva más deseada por todos los motoristas.